Una primera definición de comunicación la encontramos en la Retórica de Aristóteles
quien la considera como “La
búsqueda de todos los medios de persuasión que tenemos a nuestro
alcance", dejando muy claramente asentado, que la meta
principal de la comunicación es la persuasión, es decir, el intento que hace el
orador de llevar a los demás a tener su mismo punto de vista.
En el proceso de comunicación podemos distinguir los siguientes componentes:
El emisor es el que "emite el mensaje", mientras que el receptor es el destinatario del mensaje. En el proceso comunicativo las funciones de emitir y recibir son intercambiables entre las personas que participan. El emisor y el receptor comparten un mismo código, es decir, todo grupo de símbolos que pueden ser estructurados , de manera que tengan algún significado.
El medio físico a través del cual se transmite el mensaje se llama canal y el mensaje es la expresión escrita, verbal o no verbal de una idea, un sentimiento o una emoción, utilizando para ello, un código común para las personas que participan en el acto comunicativo.
Cuando el mensaje es traducido a un idioma o código adecuado para los medios de transición y los destinatarios, se produce la codificación, es decir, el proceso de producción del mensaje por el emisor, mientras que la re-traducción del mensaje con el fin de extraer su significado se denomina decodificación. Todo proceso de comunicación se produce en un contexto, que está formado por un grupo de factores de carácter psicológico, sociológico y físico.